El cólico del lactante es uno de los motivos más frecuentes de consulta pediátrica, debido al sufrimiento que genera en el bebé de pocos días o semanas y en los padres que no saben qué hacer para ayudarle.
Se trata de una contracción o espasmo brusco de la musculatura lisa intestinal que aún no está desarrollada, que afecta a lactantes sanos, a la cual el bebé reacciona mediante el llanto.
Aparece entre los primeros 15 días y los 3 ó 4 meses de vida convirtiéndose en una fuente de preocupación para los padres durante la primera etapa de vida del bebé.
Sienten impotencia y agotamiento al ver que el bebé sigue llorando sin consuelo a pesar de todos los esfuerzos por calmarlo.
Con el Método Rubio conseguiremos una mejoría de las funciones digestivas de manera natural, respetando los ritmos naturales del niño. Se regula la alimentación del bebé, realizando unas tomas más correctas, también el tránsito intestinal y la evacuación de heces y gases, teniendo menos dificultad para eructar, aumentando así el bienestar general del bebé, la calidad y tiempo de sueño.
El Método Rubio para el cólico del lactante se realiza en dos sesiones, una primera para elastificar la zona más externa y una segunda sesión entre 5 y 7 días después sobre la zona profunda. En cólicos más severos serán necesarias más sesiones.
Esta técnica consiste en unas suaves e indoloras maniobras, mediante un movimiento cuidadoso de los dedos sobre la zona abdominal, con una duración de entre 30 y 45 min., procurando que el bebé esté lo más relajado posible.
Mediante el Método Rubio, conseguiremos mejorar las funciones relacionadas con la alimentación, asimilación y eliminación, aumentando su bienestar y su calidad de sueño.
Por lo tanto mediante este trabajo conseguiremos armonizar, relajar y elastificar el aparato digestivo, desde el esfínter esofágico inferior de la entrada del estómago hasta el recto.
Episodios de llanto intenso e inconsolable de comienzo repentino sin causa aparente, más acusado al final del día, cuya duración puede variar entre varios minutos o prolongarse durante varias horas. No hay nada que consuele y calme este llanto aumentando así el grado de ansiedad del pequeño y de los padres. Como consecuencia se produce una alteración en el ritmo del sueño y en la calidad de las tomas.
El bebé presenta un enrojecimiento facial, cierra fuerte los puños, recoge las piernas hacia tripa y una musculatura hipertónica.
El diagnóstico del cólico del lactante de Wessel se basa en «la regla de 3»:
Se puede decir que la causa del cólico del lactante es de origen desconocido, y que su origen sea un conjunto de factores que predisponga al bebé a padecer esta alteración.
La Osteopatía Infantil y la Fisioterapia Pediátrica ofrecen una solución definitiva para curar los dolores ocasionados por los cólicos que padece tu bebé. En Zaintzen las combinamos con el Método Rubio y técnicas de Ortopráctica para conseguirlo.
El osteópata infantil en los cólicos del lactante emplea unas Las técnicas que empleamos son muy delicadas, efectuadas con mucha precisión e indoloras que no presentan ningún riesgo para el bebé.
Realizamos un trabajo manual muy preciso en el abdomen de tu bebé para que se ablanden los tejidos del aparato digestivo y en la base de la cabeza donde está el nervio encargado de las funciones digestivas (neumogástrico). La manipulación suave de esta zona equilibra el mal funcionamiento de este nervio.
De esta forma se compensa el efecto de las tensiones de los tejidos y nervios originadas en el momento del parto y restablecemos la función de las conexiones nerviosas que rigen el funcionamiento del aparato digestivo de tu bebé.
Primero consultar con su pediatra para hacer una valoración del bebé y descartar algún otro tipo de problema.
De no ser así, podemos ayudar al bebé:
Favoreciendo el eructo después de cada toma, colocándolo en posición vertical. Mejorar las deposiciones y la expulsión de gases, mediante flexión de piernas sobre el abdomen y masajes suaves en la zona del abdomen.
Adaptar de manera correcta la alimentación con una adecuada cantidad y número de tomas.
Durante la lactancia materna, evitar el café, bebidas gasificadas, chocolate.. ya que pueden alterar a tu bebé.
Comprueba que no esté hambriento o demasiado lleno, ya que podría ser la causa del llanto.
Dale un baño templado, háblale, acaríciale, ponle música tranquila, eso les relaja.
El porteo y cogerles en brazos calma al bebé, favoreciendo las digestiones y eliminación de aires.
Busca otras soluciones para aliviar el cólico del lactante acudiendo a un centro especializado en Fisioterapia/Osteopatía Pediátrica donde valorar al bebé y aplicar técnicas adecuadas como el Método Rubio para aliviar los dolores del bebé y aportar bienestar en esta primera etapa de vida.
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